DIABETES Y DISFUNCIÓN ERÉCTIL

05.05.2020

La disfunción eréctil, es la incapacidad de lograr una erección o mantenerla con la suficiente firmeza como para tener una relación sexual, es un problema frecuente en hombres con diabetes, especialmente si tienen diabetes de tipo 2. Esto puede deberse a lesiones en los nervios y en los vasos sanguíneos causadas por un control deficiente de los niveles de azúcar en sangre a largo plazo.

La disfunción eréctil también puede estar relacionada con otras afecciones frecuentes en los hombres con diabetes, como la presión arterial alta y la enfermedad cardíaca. La disfunción eréctil puede presentarse más pronto en los hombres con diabetes que en los hombres sin esta enfermedad. La dificultad para mantener una erección puede incluso anticiparse al diagnóstico de diabetes.

La diabetes es una enfermedad en la que el nivel de glucosa (azúcar) en sangre es demasiado alto. Un nivel alto de glucosa durante varios años puede dañar los tejidos y fibras del pene dificultando la erección.

¿Cómo afecta la diabetes a los problemas de erección?

La diabetes puede dañar los nervios, el tejido eréctil y los pequeños vasos sanguíneos en el pene:

- El daño en el tejido eréctil no permitirá que las fibras musculares del pene se relajen adecuadamente, de manera que el pene no se puede llenar durante la erección.

- El daño en los nervios puede dar lugar a menos sensaciones en el pene y menos señalización hacia él desde el cerebro, lo que hace más difícil conseguir y mantener una erección.

- El daño en los vasos sanguíneos también impedirá que el tejido eréctil se llene de sangre.

Cualquiera que tenga diabetes y sienta que es la causa de problemas en su vida sexual debería realizar una consulta médica.. El médico puede comprobar si hay alteraciones en las arterias o el sistema nervioso. En algunas ocasiones estos aspectos necesitan atención especial por sí mismos. El médico también puede comprobar si algún medicamento que está recibiendo puede contribuir a la disfunción eréctil.

Afortunadamente, el tratamiento para la disfunción eréctil en la diabetes ha mejorado considerablemente. A menudo el primer paso es reconocer el problema es el mayor obstáculo. Una vez que se ha superado, y con ayuda y apoyo de tu pareja y del médico, puedes empezar el tratamiento.

¿Qué tratamientos hay disponibles?

La gran mayoría de los tratamientos disponibles en la actualidad pueden ser eficaces en hombres con diabetes. Se trata de encontrar el más adecuado. Los medicamentos orales se usan a menudo como primera línea de tratamiento, (diferentes opciones de terapias con distinta duración de acción y tratamiento diario), la toma de un vasodilatador como el TADALAFILO estableciendo la dosis de acuerdo a la situación especial de cada paciente. El tratamiento de segunda línea se basa en la Farmacología Intracavernosa (FIC) que consisten en aplicar en el pene (en los cuerpos cavernosos) pequeñas dosis de drogas vasodilatadoras, que actúan a nivel local, permitiendo una erección firme y duradera.

Adecuado control de la diabetes

Para que los tratamientos destinados a la mejoría de la disfunción eréctil tengan la respuesta esperada es indispensable el adecuado control de la diabetes, para eso es necesario:

Dieta adecuada: Aporte calórico de acuerdo al peso. Evitando la ingesta de hidratos de carbono refinados, estos son los que no tienen fibra y en el cuerpo se comportan como los carbohidratos simples, es decir, se digieren a gran velocidad, provocando que el nivel de azúcar en sangre aumenta rápidamente. Evitar azúcar, bebidas azucaradas, postres, alcohol, pan, dulces en general.

Actividad física: Hay suficiente evidencia que el ejercicio aeróbico mejora el metabolismo de los hidratos de carbono regularizando los niveles de glucosa y lípidos. Caminatas 150 minutos semanales son suficientes para lograr estos efectos. 

Automonitoreo de glucemia: Los pacientes que se realizan dosaje domiciliario de sus niveles de glucosa tienen más conocimiento de sus variaciones y de esta manera pueden controlar mejor los niveles de glucemia. 

Medicación: Es importante tomar los medicamentos, ya sea vía oral o inyecciones de insulina en forma diaria, sin interrupciones. 

Controles médicos y análisis de laboratorio periódicos: La diabetes es una enfermedad crónica que afecta diversos órganos: aparato circulatorio, sistema nervioso, vista, riñones, etc. Debido a esto es imprescindible concurrir a las consultas con el diabetólogo con la frecuencia que él determine, según los caso, y realizar todos los estudios solicitados para el adecuado control. El dosaje de Hemoglobina glicosilada (HbA1c) en forma periódica es fundamental porque nos dará idea del control de la glucemia en periodos más largos (4 meses). 

La educación terapéutica en diabetes es un proceso de aprendizaje que facilita los conocimientos y las habilidades necesarias a las personas con diabetes y a la familia, para poder tomar decisiones sobre el tratamiento.

Comprender que un adecuado control de la diabetes aporta

Dr. José Luis González Salazar